lunes, 24 de octubre de 2011

Actividad 1.



1.-Leer el Viaje Misionero de San Francisco Xavier.

2.- Leer la experiencia en el voluntariado jesuita de Miguel Cruz Solares

3.- Realizar una reflexión por escrito donde expongas cómo se manifiesta el amor de Dios en el mundo, en la experiencia de Migue Cruz Solares.

4.-Fecha de entrega la próxima semana en clase de Orientación Educativa.


VIAJE MISIONERO A INDIA:

El 7 de abril de 1531, Francisco Xavier viajó a la India junto con uno de sus amigos, cuando llegan a Goa, estaba la enfermedad de la peste. Francisco se dedica a dar confianza y a descubrir a todos el amor de Dios, a curar y hasta hacer milagros. Evangelizando jóvenes abre escuelas, colegios y hospitales, bautiza sin descansar, aceptando por amor miles de sacrificios y llevando a todos a la oración y a la conversión. Realizó constantes visitas a Tuticorín y Manapar predicando a nativos que habían sido bautizados antes pero nunca instruidos en la fe, pasando mucho tiempo en la zona de Pesquería comiendo y viviendo con los pescadores, reconociendo sus carencias y sus riquezas personales y espirituales, además de crear un catecismo adaptado del portugués a su lengua natural para entender mejor la voluntad de Dios a través de Jesús.

Caso.

Hoy es 24 de diciembre….

Después de mucho tiempo he despertado y me he dado cuenta…. Que estoy solo, sin mi familia en un día tan importante, me levanté y este día perdí por unas horas la alegría que tanto me caracterizaba en la casa, por una simple razón extrañaba mi familia, mi realidad, mis amigos y mis comodidades. Este día cuando Salí de Casa Blanca al patio era un día muy frio, nublado y nadie sonreía, todos en la casa recordando la alegría con nuestras familias, esos momentos de felicidad y hoy sufriendo por ellos, viviendo por ellos, sonriendo por ellos ¿para qué?.

Con el caminar del día fui a comer a casa de las hermanas y la comida no sabía a nada, estaba comiendo por mera inercia, no había nada en la mesa, nos encontrábamos en esa mesa 3 hermanas, 3 voluntarios, la familia de uno de los voluntarios y el padre. Terminamos de comer, salimos con una desgana y con una falta de algo.

Caminando para regresar a la casa del migrante empezó a llover, el voluntario alemán y yo nos sentamos en una banca en frente de catedral, así como la lluvia caía nosotros caíamos también. No decíamos ni una palabra, fue muy triste. Tomamos el camión y regresamos a la casa del migrante, aun con el silencio hablando por nosotros, llegando a la casa del migrante nos abrió la puerta Arnulfo un migrante salvadoreño, que había perdido el brazo en este duro andar y con una sonrisa en la cara dijo: “ los voluntarios perdieron la sonrisa” y se empezó a reír a carcajadas, de cómo nos veíamos ( jajajaja).

Ahí empezó la magia que tienen esos seres humanos, tan increíbles, tan valientes y tan felices llamados Migrantes ilegales o indocumentados. En este momento decidí dejar mis “problemas” a un lado y me dedique a vivir este momento en mi vida muy importante, que tal vez sea la única vez que lo pueda vivir y trate de olvidar todo eso que me aquejaba… empezó la magia de la navidad. Llego la hora de la cena, cenamos, convivimos, nos reímos y nunca dejamos de vivir, que fue lo más importante en una casa donde, no existían las fronteras y sobre todo países. Éramos un grupo de personas luchando por nuestros sueños, diferentes, pero sueños a final de cuentas.

Después de la cena hubo dos migrantes que empezaron a grabar uno de los momentos más importantes en mi vida, con una cámara de madera y una cuerda hecha micrófono. Me entrevistaron y me preguntan ¿qué opinas de los migrantes?, ¿qué piensas de que estas aquí?¿ Y que sientes en este momento?, con estas preguntas me di cuenta del ¿porque? Estaba viviendo este momento, para darme cuenta de que somos seres humanos luchando por nuestros sueños, capaces de sonreír y no importa de dónde vengamos o que pensemos sino que somos seres de luz y que hay un Dios que ve todo a través de una madera (cámara) y escucha todo a través de una cuerda (micrófono) y solo se está riendo de cómo “vivimos” nuestras vidas y nos da la oportunidad de conocer gente y amigos.

Terminando todo lo de las entrevistas y riéndonos de todo, pasamos a la oración, que afortunadamente yo pude llevar, fue una oración donde nos pusimos en círculo y dije que todos pidiéramos por lo que quisiéramos, en distintas voces, pero a la vez en una sola se escuchaba: “pido por mi mama que murió hace una semana y yo estaba en este camino”, “pido por mis hijos y esposa”, “pido por mis hermanos, que están pasándola mal” en ese momento éramos seres humanos entregándonos a un mismo Dios. Luego regalamos tarjetas de teléfono para que hablaran a sus países y hablaran con la gente que más amaban en este mundo y me di cuenta que no existen diferencias entre los migrantes y yo como voluntario, sino que somos muchos seres humanos tratando de luchar por lo que amamos y creemos. ES MÁS FUERTE EL HAMBRE QUE EL MIEDO…

M.E.C.S.

Escribe un pensamiento o una reflexión sobre qué te hicieron sentir el viaje de Xavier a la India con relación al relato del voluntariado con migrantes.